En el artículo de hoy vengo a contarte que la patata puede ser una excelente aliada en la pérdida de peso, el motivo: su poder saciante.
Pensando en alimentos que despreciamos por ello y, con mala fama algo injustificada, se me ocurrió hablaros de la patata.
Si no me equivoco, la tienes en el saco de alimentos a evitar cuando se busca adelgazar, pero, hoy vengo a contarte que puede ser una excelente aliada en la pérdida de peso, el motivo: SU PODER SACIANTE.
Además de su versatilidad en platos y ser un alimento bien tolerado por casi todos los individuos, gusta bastante y es muy económica, algo también muy importante en enero.
Pero volviendo a la característica que la hace muy adecuada en la pérdida de peso, mencionar que se encuentra entre los alimentos más saciantes, nos sentimos llenos al consumir una ración normal, combinándola con verduras y alguna fuente de proteína.
La mala fama de la patata viene dada porque su consumo más extendido es en forma de patatas chips y en restaurantes de comida rápida, donde los almidones de la patata absorben gran cantidad de aceites de mala calidad donde se fríen, pero al final de este artículo te propondré dos formas muy saludables de consumirlas.
Bien es cierto que no es un alimento muy nutritivo, no es como las verduras, que poseen muchos micronutrientes interesantes (vitaminas y minerales) en pocas calorías. La patata es poco calórica y por 150 g, una patata pequeña, tiene pocos hidratos de carbono, su principal nutriente, pues prácticamente no tiene proteína ni grasa, por eso es interesante combinarla con verduras.
Recomendaciones para su consumo
Prepárala cocida, al vapor, asada o al micro y consérvala en frío. Al enfriarla, ocurre una reacción química en los hidratos de carbono de la patata que hacen que casi se comporte como una fibra dietética, sirviendo además de alimento a nuestra microbiota intestinal, todo son ventajas.
Y un truquito para hacerlas al microondas rápidamente: lávalas, mételas en el micro en un plato o un recipiente de vidrio o silicona, no plástico, pon los minutos necesarios, y lista. La conservas con piel, luego la pelas para añadir a tu platos y ensaladas.
Os sugería combinarla con verduras y proteína, pues aquí van dos recetas saludables y bajas en calorías a la par que muy saciantes:
– Hervido de verduras y pescado: colocar en agua una pescada por ejemplo, una cebolla, judías verdes, una zanahoria y una patata, puedes tomar todo con el caldo o sacar, escurrir y servir aliñado con aceite y limón.
– Tortilla de patata cocida y coliflor: cuece la coliflor y la patata, trocea y mezcla con 2 o tres huevos, engrasa con aceite de oliva virgen una sartén grande y pocha una cebolla, mezcla la cebolla con el huevo también, vierte la mezcla en la sartén y cocina a fuego no muy alto, pon un poco de perejil fresco. Amarás esta tortilla.
Artículo para NovaLife, Antena3.